¿Qué es el espolón calcáneo?

El espolón calcáneo es una prominencia ósea o exostosis que puede aparecer en la parte anterior del talón (calcáneo) como consecuencia de estiramientos excesivos y continuados de la fascia plantar (banda de tejido conjuntivo que recubre los músculos de la zona). Esto puede derivar en una inflamación del tejido circundante que provoca dolor y que puede provocar la aparición del espolón calcáneo. Es más frecuente en personas de edad media entre 35-60 años. Las mujeres tienen mayor predisposición que en los hombres a padecerlo. Es una lesión muy común, de carácter leve y que tiene un alto porcentaje de recuperación.

¿Qué es la fascitis plantar?

La fascitis plantar es un trastorno doloroso que se produce como consecuencia de una irritación y posterior inflamación de la fascia. Es decir, del tejido que recubre la planta del pie.

Se trata de una patología que en el 80% de los casos afecta al talón, aunque también puede manifestarse en el arco plantar o, incluso, en ambos.

Cuando la fascitis plantar no se trata y se deja pasar la capacidad del organismo para recuperarse se ve desbordada y termina por producirse una degeneración de las fibras como consecuencia de repetidos microtraumatismos.

En estos casos la fascitis plantar se convierte en una dolencia crónica que cursa con mucho dolor y que incapacita al paciente. Además, llegados a este punto más del 60% de los casos acaban dando lugar progresivamente a un espolón.

 

Síntomas de un espolón calcáneo

Los síntomas de un espolón calcáneo son variados y algunos de ellos coinciden con los de otras dolencias.

Su síntoma principal es un dolor intenso en la parte interna del talón. Sin embargo, los pinchazos pueden aparecer en cualquier zona de la planta del pie, no solo en la parte posterior.

La aparición de este problema no es lo que produce realmente el dolor. Lo que provoca esas molestias tan intensas es la irritación de los tejidos que rodean la zona afectada.

Además, no siempre duele igual a lo largo de todo el día. El dolor se incrementa especialmente al levantarse por la mañana de la cama y poner, por primera vez, los pies en el suelo después de estar tumbado tanto tiempo. Otra ocasión en la que el dolor aumenta es cuando realizamos actividades como correr o caminar.

Para que sea más fácil conocer si sufrimos de espolón calcáneo, este es un listado resumido de los síntomas más habituales:

– Dolor intenso, muy similar a pinchazos, en la parte interna del talón.

– Dolor característico que desaparece, de una forma típica, en reposo, y empeora cuando nos ponemos de pie.

– Como normal general, aunque existen excepciones, el dolor es más intenso por la mañana.

– El dolor va a peor cuando caminamos por superficies duras o cuando cargamos con algún objeto pesado, como puede ser una maleta.

– Puede llegar a ser un dolor tan intenso que nos impida realizar las actividades diarias habituales.

 

¿Cómo saber si padezco un Espolón calcáneo?

Cómo menciónanos previamente, en algunos pacientes esta afección no causa un síntoma o molestia destacable, incluso en aquellos casos que la exostosis es considerablemente grande y evidenciada por estudios radiológicos. La sintomatología de esta afección se origina a consecuencia del estrés que esta formación ósea anómala produce en los tejidos blandos adyacentes. Siendo así el síntoma más destacable es el dolor punzante en el talón (o talones), que es descrito por muchos pacientes como la sensación de estar pisando una astilla o un clavo que arde en el talón. Debido a que los espolones calcáneos son permanentes, el dolor que causan tiende a ser crónico, es decir, constante.

Este síntoma tan destacable en uno o ambos talones se hace sentir tan pronto como se despierta y comienza a caminar. Algunas personas sienten al continuar caminando, un ligero alivio y no perciben otras molestias. Mientras que otras personas encuentran en la caminata continua u otras formas de esfuerzo plantar, un desencadenante para que el dolor regrese o empeore.

En algunos la formación ósea anómala puede sentirse e incluso palparse en la piel del talón, pero como comentamos previamente, esto es infrecuente en los espolones calcáneos plantares, debido a que las plantas de nuestros pies están densamente cubiertas por tejido blando, siendo sólo visible a través de una radiografía lateral de pie. Sin embargo, aunque no sea palpable, el ejercer presión sobre la zona del espolón puede causar dolor de talón a la palpación.

Factores causales desencadenantes

Variedad de factores pueden originar los movimientos desbalanceados y la alteración biomecánica que conlleva al desarrollo de esta exostosis:

Sobrepeso: al caminar y especialmente al correr, los pies están cargados con todo el peso corporal, por ende, los pies de las personas con sobrepeso están expuestos a más estrés que aquello con peso normal. Además, de las personas con sobrepeso, las personas altas también suelen desarrolla esta afección. Porque incluso con una longitud corporal superior a la media, la carga en la planta del pie y la presión en el talón aumentan significativamente.

Desbalance o debilidad muscular: si los músculos están demasiado débiles, por ejemplo, debido a la falta de ejercicio, los pies se sobrecargan más rápidamente. Un acortamiento de los músculos de la pantorrilla (tríceps sural) también puede poner los tendones plantares bajo una tensión desfavorable y provocar un espolón en el talón.

Desbalances biomecánicos: las desalineaciones en la columna vertebral y la inclinación pélvica también deben considerarse como causas. También algunas deformidades congénitas o adquiridas de los pies: pie plano o cavo, hacen que la fascia plantar se estire demasiado y ejerza mayor fuerza y tracción sobre punto de origen en el hueso del talón. El “desgaste” de la almohadilla de grasa del talón también se cree que causa las quejas en esta área.

Calzado incorrecto: los zapatos con suelas de cuero delgadas y sin soporte plantar pueden provocar una distribución de presión desfavorable en el pie. Así como también los zapatos estrechos, ya que no ofrecen una amortiguación suficiente en la suela del zapato y conllevan rápidamente a la alteración de la pisada y la sobrecarga del talón.

Actividades estresantes para los pies: cuando se practica deporte o al estar de pie y caminar durante mucho tiempo, la aponeurosis plantar se estresa mucho y pueden formar un espolón en el talón, especialmente si, además, en estas situaciones se lleva un calzado inadecuado.

 

 

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